Aunque la primavera haya llegado, todavía en muchas comunidades seguimos teniendo bajas temperaturas y los catarros y gripes han vuelto al acecho. Con la toma de antibióticos, nuestra flora intestinal puede resentirse. Los antibióticos, necesarios ante infecciones, no solo atacan a los agentes patógenos si no que debilitan nuestra flora intestinal y puede provocarnos:
- Flatulencia, estreñimiento y/o diarrea
- Mala absorción de nutrientes
- Intolerancias alimentarias
- Trastornos cutáneos
- Facilidad para coger resfriados
Existen ciertos preparados que ayudan a nuestras defensas y con ello favorecen el buen estado de nuestra flora intestinal como los Probióticos, microorganismos vivos que ingeridos en cantidades óptimas, aportan importantes beneficios a nuestro organismo.